La Perestroika prometía muchas cosas a los ciudadanos, pero algunos dirigentes subieron los sueldos a varias categorías de ocupados, esto provocó la escasez y empeoró la situación.
Sin embargo la Ley de Empresa fué lo más destructivo porque redujo la inversión, se crearon bancos propios y los créditos ilimitados provocarón inflación y el interés por el dinero llegó a ser mínimo.
La perestroika iba complementada por la glasnost, una política de apertura hacia los medios de comunicación, permitiendo la libertad de expresión y de opinión, al contrario que la anterior, el gobierno permitía una pequeña autocrítica y reconocía sus defectos y esto ayudó a resolverlos rapidamente.
Ya al final del mandato de Gorbachov, la perestroika empezó a recibir críticas que temían que éstas destruyeran el sistema socialista y llevaran a la decadencia del país.
Muchas repúblicas federadas de Europa del Este declararon su independencia, lo que llevó a la disolución de la URSS el 25 de diciembre de 1991, día que Gorbachov renunciaba a su cargo y Yeltsin se convirtió en su sucesor, abandonando el comunismo y convirtiéndose en presidente de la recién fundada Federación Rusa.
Héctor Damian M. Serrano 2°A N.L.27